¿Fiestita herética para todos y todas?

¿Quién es la "obispa" que visitará Francisco para celebrar la herejía luterana?

La “obispa” de Suecia, Eva Brunne, que reúne toda la corrección política progre-liberal, fue en su momento quien decidió quitar las cruces de las iglesias donde hospedó “refugiados”… para que los inmigrantes musulmanes se sientan bienvenidos. ¡Curiosa forma de evangelizar! [http://www.actuall.com/laicismo/una-obispa-lesbiana-quiere-retirar-las-cruces-de-las-iglesias-de-suecia-para-atraer-a-los-musulmanes/].

Ella, lesbiana activa y declarada, fue elegida en Estocolmo como "obispa" a los 55 años de edad. Convive con su "compañera", Gunilla Linden, y crian un niño de 3 años... "hijo de éstas", dice la prensa. [http://protestantedigital.com/internacional/23280/Suecia_eligen_obispa_luterana_a_una_lesbiana_con_pareja]. 

Pero aunque esta deriva liberal-progresista de los hijos desviados de Lutero en Suecia les hace perder fieles... por ahora parece preocuparles muy poco. ¡Quizás sea porque plata no les falta! Veamos, de todos modos, un poco de su historia y algunas estadísticas.

Eva Brunne el día de su ordenación de obispa junto a la actual realeza de Suecia.

El origen de los luteranos suecos: un rey

El rey Gustavo I de Suecia creó su propia “iglesia nacional luterana”, en 1526, la Svenska Kyrkan, confiscando las propiedades católicas. Desde entonces, todo el país se consideró luterano. 

En 2013, sin embargo, las estadísticas constataron que por primera vez ni la mitad de los bebés nacidos ese año eran bautizados en esta comunidad, donde se dan más fallecimientos que nuevos ingresos.

En 1972, la Svenska Kyrkan implicaba al 95% de la población del país. Hoy no pertenecen a ella ni el 66% de la población. Suma apenas 6,4 millones de miembros, aunque sólo un 2% de ellos van a los oficios religiosos con regularidad. 

Según la revista evangélica Varlden Idag, en 2013 fueron 71.693 personas las que dejaron oficialmente esta comunidad, según sus detalladas estadísticas. En 2009 -el año que, como vimos, se consagró obispa la activista lesbiana Eva Brunne- se fueron 73.000 personas; en 2012 algo más de 53.000. 

La obispa Eva Brunne en una marcha del orgullo gay.

Curiosamente, la “iglesia luterana sueca” -entre comillas, porque para los Católicos, ellos no son "Iglesia"- ni condena ni combate el aborto. Es un país con aborto libre y gratuito desde 1975 y una educación sexual obligatoria y sistemática que no ha impedido que las adolescentes suecas sean de las que más abortan de Europa (22,5 casos cada mil chicas de 15 a 19 años en 2009). De 2000 a 2010 el aborto pasó de 30.000 a 38.000 casos anuales. 

La “iglesia luterana sueca”  tampoco evangeliza. Ordena mujeres como pastoras/sacerdotisas porque así lo impuso el Parlamento de Suecia en 1960. Hace ceremonias de uniones gay desde 2007, y bodas gays religiosas desde 2009.

Los vecinos escandinavos, las iglesias luteranas de Dinamarca y Finlandia, igual de liberales, tampoco crecen: están estancadas en unos 4,5 millones de fieles cada una, y a la baja.

Y en Alemania, desde 2009 hay más católicos que luteranos, no porque el catolicismo crezca espectacularmente -se mantiene en unos 25 millones de fieles-, sino porque el luteranismo pierde fieles por demografía (fallecimientos) y desinterés. 

Las interlocutoras de Francisco. 

Crónica de una "Celebración" Pecaminosa

Y a los Católicos ¿debiera preocuparnos esta pérdida de fieles de estos grupos progre-liberales? Creemos que sí… sobre todo porque el Papa Francisco parece empujar a la Iglesia Católica más y más hacia este luteranismo de la peor calaña -aunque no todos los luteranos lo comparten-... y con el que se juntará para “festejar” los 500 años de la Reforma Luterana.

También debería preocuparnos porque los herejes modernistas que permanecen en la Iglesia usan como argumento para justificar la "ideología de género" -y todo tipo de desviaciones doctrinales- dentro de la Iglesia Católica esgrimiendo el hecho de que "cada vez somos menos los católicos", numéricamente hablando. Sin embargo, estos grupúsculos protestantes que como vemos están llenos de militantes "gender" están en condiciones deplorables... que no queremos para la Iglesia de Cristo.

Pero volvamos a nuestro tema de la fiestita herética. Las dudas y polémicas sobre si la Iglesia Católica debía sumarse a la "celebración" de la Reforma Luterana viene de lejos. Y en el año 2012, el Vaticano anunció que el entonces Papa Benedicto XVI no viajaría a su país de origen con ocasión de este lamentable aniversario. 

A propósito de esto, el Cardenal suizo Kurt Koch -presidente del Consejo Pontificio para la Unidad de los Cristianos-, manifestó entonces que “no podemos celebrar un pecado” y que “la separación de las iglesias protestantes de la Iglesia no es una expresión de éxito, sino el fracaso de la Reforma”. ¡Lógico, lógico! Lo que todo buen Católico advierte ante semejante barbaridad.

Sin embargo ese mismo Cardenal, que todavía ocupa el mismo cargo en el "ecumenismo" vaticano, ha declarado hace poco que “concentrándonos juntos en la centralidad de Dios y en un enfoque cristocéntrico, luteranos y católicos pueden conmemorar ecuménicamente la Reforma, no de una manera puramente pragmática, sino en el profundo sentido de la fe en Cristo crucificado y resucitado”. ¿Qué le pasó al Suizo? No lo sabemos... pero algo grave será... sin dudas.

Recordemos como al pasar que la “obispa” primada de la Iglesia de Suecia, Antje Jackelén -que el pasado mayo se reunió con Francisco y fue saludada por él como “querida hermana” (glup!)-, explicó que “la idea base del evento de Malmö -nota: donde se celebrará el quinto centenario de la Reforma- es describir el proceso que va del conflicto a la comunión concentrándonos en la esperanza para el futuro”.

"Del conflicto a la comunión"... ¿O santificado sea el pecado? El tiempo dirá.

Comentario:

Sin dudas esta situación no tiene precedentes en la Iglesia: ¿qué hay que festejar? ¿El gravísimo pecado de herejía y de cisma? Ningún buen católico que ame sinceramente a Cristo y a Su Iglesia debe hacerse eco de este disparate... Es más: debe oponerse a él con todas sus fuerzas.

Pregunta: ¿no quedan ya Sacerdotes, Obispos, Cardenales que recordando que "de Dios nadie se burla" denuncien esta desgraciada y maldita "celebración" que ahondará la confusión en miles de cabezas y corazones católicos malformados? Todavía se puede reaccionar.

Por otro lado, sería bueno que Francisco, aprovechando este viaje a Malmö, Suecia... 

¡se quede allí con sus feligreses!