Matrimonio hombre-mujer, institución única e irremplazable - Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos

Matrimonio hombre-mujer, institución única e irremplazable
Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos 

Washington (Estado Unidos), 15 Jul. 10 (AICA).- La Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (USCCB) dio a conocer un comunicado ayer en el que recuerdan que "el Matrimonio –la unión entre un hombre y una mujer– es una institución única e irremplazable. El tejido mismo de nuestra sociedad depende de él. Nada se compara a la exclusiva y permanente unión entre el esposo y la esposa". Así lo señalaron los prelados en referencia a un fallo de una corte federal en Massachusetts que rechaza esta definición.

En un comunicado dado a conocer por el arzobispo de Louisville y jefe del Comité Ad Hoc para la Defensa del Matrimonio de la USCCB, monseñor Joseph Kurtz, se expresa la grave preocupación de los prelados por dos fallos del 8 de julio en una corte federal de Massachusetts que indican que la sección 3 de la Ley de Defensa del Matrimonio (DOMA, en inglés) es inconstitucional. Esta norma señala que el matrimonio consiste en la unión legal de un hombre y una mujer.

El texto de los obispos señala también que "el Estado tiene el deber de emplear la ley civil para reforzar –y de hecho privilegiar de modo único– esta institución vital para la sociedad civil. Las razones para respaldar al matrimonio con la ley son incontables, así como para proteger el lugar exclusivo de los esposos y esposas, el rol indispensable de los padres y las madres, y los derechos de los niños, que con frecuencia son los más vulnerables entre nosotros".

"Sin embargo –advierte– un juez ha decidido que una ley que protege el matrimonio (DOMA) fracasa en su intención de servir un interés gubernamental singular y mínimamente racional. En nombre del Comité Ad Hoc para la Defensa del Matrimonio que hace parte del Episcopado expreso mi grave preocupación por estos peligrosos y decepcionantes fallos que ignoran incluso los propósito más simples del matrimonio y por lo tanto ofenden a la verdadera justicia".

El Arzobispo dijo luego que "alegar que definir al matrimonio como la unión de un hombre y una mujer es de algún modo irracional, prejuiciado o incluso errado, es una gran falta al servicio no sólo de la verdad sino al bien de la nación" y precisó que "el matrimonio existe desde antes que el Estado y no está abierto a redefinición alguna por parte de él. El rol del Estado, en vez de ello, es respetar y reforzar el matrimonio".

Finalmente el Prelado señaló que "la decisión del jueves, en contraste, usa el poder del Estado para atacar la perenne definición de matrimonio, reduciéndolo meramente a la unión de dos adultos cualquiera que la consienten. Pero sólo el hombre y la mujer son capaces de hacer parte del único matrimonio, que da vida y que conlleva una serie de responsabilidades específicas. Proteger el matrimonio como la unión entre un hombre y una mujer no es sólo algo legítimo sino un interés vital del gobierno".